*Según algunas encuestas realizadas en días pasados, la ciudadanía se siente cansada de los regidores de MC que están viviendo simplemente a costa del show mediático.
Purépero, Michoacán.-Crece la molestia entre los habitantes de Purépero ante el actuar de un pequeño grupo de regidores que, lejos de servir al pueblo, se han querido convertir en protagonistas de redes sociales. Los videos, los discursos de “víctimas” y las publicaciones cargadas de drama ya no le están convenciendo a nadie: la ciudadanía exige resultados, no meras actuaciones.
Desde hace algunas semanas, la población observa cómo algunos de estos funcionarios se dedican más a grabar “videitos” que a gestionar y cumplir con sus obligaciones. “Parecen influencers frustrados más que representantes del pueblo, para eso se les paga?”, señalaron algunos vecinos molestos del barrio del Taray quienes reclaman que los problemas reales del municipio no se resuelven con likes ni con discursos fingidos.
“Llevan más de un año y que han traído de beneficio al pueblo?… nosotros pagamos sus sueldos”- externan algunos ciudadanos.
Lo cierto es que los purepénses ya están cansados de los “shows mediáticos” que solo buscan confundir, crear división y victimizar. La gente lo dice claro y fuerte: si no pueden con el cargo, si no tienen la capacidad o el compromiso, que renuncien.
Trascendió que dentro del Ayuntamiento, a petición de los controles de fiscalización del gobierno del estado ya se analiza la posibilidad de solicitar la intervención ante Auditoría para revisar la ausencia de trabajo y las constantes omisiones de estos regidores a sus horarios, funciones y participación al interior del cabildo. De comprobarse tal negligencia, podrían iniciarse procedimientos administrativos.
“Mientras unos trabajan por el desarrollo del municipio, otros viven en el teatro político permanente”, comentó una fuente interna, quien pidió anonimato por seguridad.
En Purépero ya no se compra el cuento de los “perseguidos”. El pueblo sabe quién trabaja y quién solo busca reflectores. La paciencia ciudadana se esta agotando, y el mensaje es contundente: Purépero quiere servidores públicos de verdad, no actores de redes sociales.
